Imagina que llueve. Imagina el camino inundado. Imagina a un hombre que va por la acera, sin luz de faroles, sin ganas de correr a protegerse. Sólo la lluvia, asidua compañera, eterna cómplice, le va minando la vida. Imagina la tarde más triste de la que tengas memoria, el cielo oscurecido por completo, sin gota de sol, con gotas en cascada, cayendo, cayendo, cayendo.
Él camina despacio, recibiéndolo todo, absorbiéndolo todo. La avenida desierta. Imagina el sonido de la lluvia raspando los charcos. Frío. Todo es frío. Sabrás imaginar -también- que el hombre no tiene a dónde llegar, que no tuvo de dónde partir, que el frío cala hasta los huesos y que la maleta que lleva está embarazada de sueños inconclusos, de canciones tristes, de caricias postergadas, de violines y pianos, de noches sabor a piel.
Imagina, cómo sólo tú sabes imaginar, el recuento que él hace de tiempos mejores, que pasa una mano por el rostro y las cicatrices de su cara son muestra fehaciente que el otoño ya llegó. No se sabe si va llorando, porque la lluvia es cómplice perfecto del llanto, nadie que llore lo hace sin lluvia.
Imagina cómo todos le miran desde el colectivo, desde las ventanas, desde cualquier rincón en que existe la alegría. Sólo él, por la avenida, sabe lo que va pensando, lleva el sobretodo inundado, el alma vacía. Imagina una historia: Su amada murió, o se fue, o nunca existió.
Imagina que da vuelta en la esquina, que no lo volverás a ver, que jamás volverás a saber de él, y no te importa. Imagina que ese hombre escribirá unas cuantas letras manchadas de lluvia, despedida traidora, esperanza perdida, soliloquio a la nada, que cualquier día de lluvia vos leerás. Tan sólo imagina. Imagina. Imagina...
El U, que dice que es bien lindo ver llover y no mojarse.
2 comentarios:
Comentario de 1000 letras quisiera hacer, dices que no te leen?? ja!
El texto como todo lo que escribes transporta, mueve, conmueve. ¿Eres tú o alguien más el que no puede llorar sin lluvia? imaginé un río saliendo de tus ojos. Gracias por compartir tu magia, tu sentir.
(ahí está el comentario, no me regañes :( )
Imagina que te imaginaron así; exiliado bajo la lluvia de desesperanza y desilusión. Imagina que te anhelaron entonces, como esas tardes de café, cuando sonriendo, desde adentro, veían llover promesas, sueños, e ilusiones. Imagina que regresaras ... aquí me encontrarías.
Publicar un comentario